Aprender a leer puede ser un proceso más complicado para algunos niños que para otros. Si su hijo tiene dificultades con la lectura, hable con su maestro y exprese su deseo y voluntad de ayudar. Pero si bien el apoyo que su hijo recibe en el hogar puede tener un gran impacto en su éxito académico, los maestros deben estar al tanto de cualquier factor que pueda afectar el desempeño del estudiante en el salón de clases.
Hágale saber al maestro de lectura que su hijo tiene una discapacidad del desarrollo que contribuye a sus problemas de lectura. Ya sea que su hijo tenga una discapacidad del lenguaje, del aprendizaje, intelectual o emocional-conductual, es importante obtener servicios de intervención que puedan ayudar a prevenir problemas adicionales en la escuela.
Infórmele al maestro de lectura sobre cualquier condición médica o medicamento que esté tomando su hijo que pueda ocasionar problemas de memoria o trastornos del sueño, cualquiera de los cuales puede contribuir a problemas de concentración y lectura.
Dígale al maestro de lectura de su hijo que tiene una discapacidad auditiva que le dificulta distinguir diferentes sonidos. Un problema de audición puede dificultar que su hijo aprenda los sonidos del habla separados, o fonemas, que se combinan para formar palabras completas, lo que dificulta la pronunciación de las palabras.
Comparta que su hijo tiene un problema de visión que está afectando su lectura. La visión borrosa o doble puede ralentizar tanto la velocidad de lectura como la comprensión, ya que su hijo tiene dificultades para concentrarse en cada palabra del texto. Una discapacidad visual también puede hacer que las palabras de una página parezcan moverse, lo que puede afectar las habilidades de lectura.
Explíquele al maestro que su hijo tiene dificultad para reconocer palabras fuera de contexto. Su hijo también puede tener problemas para comprender, resumir y/o recordar lo que lee.
Señale que su hijo parece carecer de concentración cuando lee. Pero lo que puede parecer falta de atención puede ser la incapacidad de: seleccionar las ideas principales en un pasaje; dar sentido a lo que él o ella está leyendo; o inferir el significado de las palabras impresas en la página.
Informe al maestro de lectura que su hijo tiene problemas para deletrear. Mientras que la lectura implica traducir letras en sonidos, la ortografía es lo contrario e implica traducir sonidos en letras. Las personas con mala ortografía a menudo tienen problemas para visualizar una palabra completa en sus mentes. Desafortunadamente, hay decenas de palabras en el idioma inglés que no se escriben como suenan. Para complicar más las cosas, su hijo puede tener un déficit neurológico en el área en la parte posterior del cerebro que almacena cómo pronunciar una palabra, qué significa y cómo deletrearla.
Leer inteligente
Por todas estas razones, en Read Smart confiamos en que podemos ayudar a su hijo no solo a leer mejor, sino también a disfrutar de la lectura. Póngase en contacto con nosotros para obtener más información hoy.
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